La verdad está en la canción
Dios, o el mismísimo diablo, los cría y ellos solitos hacen el resto.
En “El tiempo de las cerezas” Bunbury y Vegas se retan en un pulso de un modo demasiado cordial en el que, aunque parece amañado previamente, Bunbury sale peor parado. Un disco de reparto demasiado equitativo y espartano, ya que se turnan para interpretar creaciones propias, excepto el tema de cierre de cada uno de los dos discos en el que cada uno hace una versión del otro. Un disco doble en el que el segundo no llega al nivel del primero, mientras que este comienza majestuosamente con Días Extraños, seguida de Puta Desagradecida como quizás el mejor momento de Bunbury. En este experimento musical se exponen a las comparaciones en el que al escuchar los reprises de Días Extraños y el Rumbo de tus sueños asusta la posibilidad de que uno se hubiera hecho cargo del material del otro. Es un trabajo de rock sin tiempo en el que se intuyen fácilmente las referencias (Dylan, Waits, Wilco, Velvet Underground…). Sin duda, una auténtica delicia.
En “El tiempo de las cerezas” Bunbury y Vegas se retan en un pulso de un modo demasiado cordial en el que, aunque parece amañado previamente, Bunbury sale peor parado. Un disco de reparto demasiado equitativo y espartano, ya que se turnan para interpretar creaciones propias, excepto el tema de cierre de cada uno de los dos discos en el que cada uno hace una versión del otro. Un disco doble en el que el segundo no llega al nivel del primero, mientras que este comienza majestuosamente con Días Extraños, seguida de Puta Desagradecida como quizás el mejor momento de Bunbury. En este experimento musical se exponen a las comparaciones en el que al escuchar los reprises de Días Extraños y el Rumbo de tus sueños asusta la posibilidad de que uno se hubiera hecho cargo del material del otro. Es un trabajo de rock sin tiempo en el que se intuyen fácilmente las referencias (Dylan, Waits, Wilco, Velvet Underground…). Sin duda, una auténtica delicia.
<< Home