jueves, septiembre 15, 2011
viernes, julio 29, 2011
domingo, diciembre 12, 2010
You make me smile
No pienso ponerme a listar nada. No creo que sea de interés cuáles son los discos que más me han gustado a mi a modo de ranking imposible. Pero lo que sí me ha dado por hacer esta tarde de domingo es pensar en los discos que difícilmente tendrán cabida en muchas de esas listas que ya nos llegan, y que por muy pequeños, modestos, locales o incipientes que sean me han gustado o parecido interesantes y que merecen al menos una escucha. No esperes lista, soy incapaz de ordenar nada en mi vida, tan solo un repaso de los que me he acordado esta tarde.
Off! - First four EP
Supergrupo LA based que incluye a gente como Keith Morris (Circle jerks, Black flag), Dimitri coast (burning brides), Steven McDonald (redd kross) y Mario Rubalcaba (hot snakes, rocket from the cripta). No esperes sonido innovador, es hardcore de toda la vida, pero bien hecho. Podría entrar en el grupo de bandas que hacían que mi hermano Gonzalo se acercara a mi cuarto para, con un gesto entre desprecio y suficiencia, decirme ‘pero qué macarra eres a veces’. Me muero de ganas de verles la semana que viene.
Dale Earnhardt Jr Jr – Horse Power EP
Si hiciera una lista de canciones del año creo que podría incluir un par de este EP, que tan solo tiene 3 originales y una versión de God only knows. It’s easy, your love is easy and I get more than I deserve, maybe everyone has someone and we get more then we deserve. All we have is nothing but our love. Es así de simple, y de cautivador.
Funeral Party –Golden age of knowhere
En realidad el disco sale oficialmente en enero, pero entre que ya lleva un tiempo disponible por ahí, que no paran de tocar en estos últimos meses y que yo los descubrí este año, los incluyo igualmente. Como siempre, me da bastante igual lo grandes o conocidos que puedan llegar a ser, a mi me gustan y punto. Me han ofrecido momentos geniales. Los directos de esta banda del este de LA son enérgicos y salvajes, dirigidos por su espíritu punk y un carismático vocalista. Destilan chulería, pero de esa que resulta adquirida por necesidad, en la calle, a modo de supervivencia, más que como pose.
Jail Weddings – Love is lawless
Admito que esta gente me tiene dividida. Los desataco porque me parecen destacables, pero mi opinión sincera sería más del tipo ‘mmm…’ Aunque termine decantándome por el sí, en otros momentos me resultan digamos más difíciles. Canciones hilarantes, con un punto ácido e infecciosas. Una banda de hasta 10 personas que en el escenario le ponen un punto melodramático a sus actuaciones. Eso sí, tienen un punto retro que me gusta. Por cierto, no te pierdas su versión del Digan lo que digan de Raphael. Sí, sí, Raphael. Ahí te la dejo.
Superhumanoids – Urgency EP
Me encanta esta gente y cómo mezclan lo electrónico con lo orgánico. Si no los has escuchado aun, ya estás tardando. Descárgate el EP en su web, aunque a lo mejor te pasa lo que a mi y no te puedes resistir a ese vinilo rojo tan molón. I’m a human, too!
Aloe Blacc – Good things
Si te gusta el soul no te estaré diciendo nada nuevo al considerar este disco uno de lso destacables del año. Si no eres mucho del asunto, te recomiendo que lo escuches igualmente. I need a dollar se hizo bastante conocida por aquí porque
Active Child –Curtis Lane EP
Un EP de 6 canciones totalmente recomendable, diría que hasta por momentos suena brillante. If you’re afraid of this world, you’ll feel safer in my arms.
I hate you just kidding – untitled EP
No llevan ni un año desde que se conocieron y acaban de sacar el EP. Folk perfecto para este invierno suave y luminoso.
jueves, noviembre 11, 2010
-menos mal que por fin te encuentro, estaba preocupada ya. Vi que me dejaste un mensaje pero te llamé directamente sin escucharlo. Al no encontrarte una y otra vez me empecé a preocupar, me preguntaba: y si en el mensaje me decía que estaba en una cárcel mejicana?
Después de descojonarme un rato tan solo he sabido decirle: no, mi vida no es tan interesante.
I got an obsession
Totalmente enganchada a esta canción. Pero enganche de ese de verdad, de que no te la puedes quitar de la cabeza y sonando en modo repeat on. Es lo que tienen las obsesiones, que todo gira a su alrededor.
Bájatela aquí.
martes, noviembre 02, 2010
Sayonara, Baby! Hasta la vista, baby!
De los que vienen, el demócrata Brown (que tiene 70 años) repetiría en el cargo 36 años después y tampoco es que me guste mucho, pero de lo malo es lo menos malo, así que mejor tan solo alegrarse de que Whitman (por lo que llevamos de escrutinio, que la noche será larga) no haya salido elegida.
A mi el que me gusta es Gavin Newsom, el alcalde de San Francisco (y primo de Joanna Newsom, qué cosas, verdad!?) que se presentaba a Lieutenant Governor –teniente governador?- que sería algo así como el vice del governador (un cargo elegible independientemente, de modo que puedes tener de segundo a tu enemigo). Este hombre, que parece caer bien a todos y con el que al parecer están encantados en SF, se postulaba a candidato demócrata o al menos a pelear en primarias, cosa que al final no ocurrió al bajarse de la carrera para la nominación precipitadamente. La versión oficial dice que fue más cosa del entorno que le empujaba a presentarse más que deseo propio de encabezar el partido demócrata. La versión no oficial dice que después de tantear el asunto dentro del partido, se echó atrás estratégicamente y con miras futuras, para no hacerse con muchos enemigos dentro y que como aun es muy joven ya le llegará su tiempo (y mientras tanto a esperar en el segundo sillón). Los cotilleos le tachan de ambicioso e inteligente que espera que llegue su momento y que tiene su vista puesta más allá del despacho de Sacramento. La verdad, pues vete tú a saber. Yo tengo buena opinión de él, pero quizás tan sólo es mejor farsante que el resto.
lunes, octubre 25, 2010
Boy, we can do much more together!
Al terminar el concierto de Sufjan Stevens el sábado, pensé que este hombre es una de las cosas más bonitas que he visto en mucho tiempo.
Siempre he pensado en Sufjan como si fuera una especie de mago, o un ilusionista. Saca cosas de donde en principio no hay y te envuelve otras de un modo delicioso a pesar de ser áridas. Ahora, tras verle en concierto por primera vez en mi vida, le veo más como un encantador de serpientes o, mejor aun, como si del flautista de hamelin se tratara. Es empezar a cantar/tocar y ya estamos todos embobados como niños a su alrededor yendo hacia donde él nos quiera guiar.
Empezó con Seven swans de un modo, digamos, en cierto modo esperado en él. Se presentó como si de un niño tímido se tratase, ‘Good evening, my name is Sufjan Stevens and I’m your entertainment tonight’. Como si hiciera falta presentarse, como si no fuera consciente de todo lo que mueve a su alrededor, de lo esperado de este disco, de lo esperado de esta gira, de haber colgado el sold out las dos noches que toca en la ciudad, cosa que ya va siendo habitual allá por donde pasa. Pero ahora que le ha dado por las maquinitas en este, su trabajo más experimental hasta el momento, no iba a quedarse ahí. Inmediatamente después se quitó la camisa de niño serio y en mangas de camiseta empezó a lo que venía. El derroche de imágenes y sonidos transformaron su concierto en una instalación de arte-musical acompañando a esas canciones que nos permiten ver momentos privados de una persona sin miedo a crear libremente ni a salirse de los márgenes.
Rodeado de hasta por diez personas en el escenario, las canciones explotan con fuerza construyendo un muro de sonido sobre el que, como si de un lienzo se tratara, sufjan se dedicará a dibujar libremente. Cuando Sufjan Stevens construye un nuevo mundo para que nos enfrasquemos en él, es imposible resistirse.
Sobre-estimulación visual y auditiva que acompaña bailando como nunca antes había hecho. Su baile resulta encantador –como todo él siempre- pero también en cierto modo algo torpe (no voy a mentir por mucho que me guste el tipo este). Al principio de too much me chocó verle en las proyecciones, después ya a medida que iba soltándose más en las coreografías de baile ya le iba pillando el punto. Como a todo el espectáculo, en general, al principio puede chocar algo pero terminas entrando en el viaje que ofrece hasta llegar a donde él quiera llevarte.
Ya puede ponerse como quiera, ya puede haberse divertido con su nuevo juguetito/sintetizador, o por muy densas o imponentes o al azar que puedan sonar sus nuevas canciones, al final de lo que habla es del tema fundamental de la música. Las canciones del EP y del disco sonaron mucho más sincronizadas en directo, mostrando una sintonía clara entre ellas, ordenándolo en este viaje de desorientación y caos que ofrece. Abrumador, en el buen sentido. Resulta que, pese a todo lo mind-blowing que pueda resultar, por momentos al final todo tiene sentido. Las canciones adquieren cierto punto de soliloquio personal y confesiones privadas entre maquinitas. Al final entiendes que esas canciones son probablemente de las más personales, honestas y heartbreaking. The main theme is love.
Lo que hace especialmente irresistible en este hombre no es tan solo su encantadora voz, sino que debe ser de lso pocos músicos tan intensamente curiosos sobre lo que le rodea. Cuando se mete en un tema -ya puede ser al encontrar su musa en un estado, en dios o en un outsider- aprende todo lo que puede para convertirlo después en el vehículo de sus canciones. En esta ocasión, un corazón roto.
Hubo un par de momentos que me gustaría destacar. El primero fue cuando se puso a hablar por un momento breve del apocalipsis al hacer referencia a las imágenes previas, para acabar concluyendo con cierto aire grave, como pensando en voz alta, the end of the world is a broken heart. En otro momento, antes de get real get right, se pasó explicando la inspiración que había encontrado en la vida y obra de Royal Robertson. La historia amarga del de Louisiana, la belleza trágica de su obra han sido fundamentales para que Sufjan saliera de donde fuera que estuvo metido un cierto tiempo.
Comentó primero que le sirvió para trabajar de un modo como no lo había hecho antes, no solo por los nuevos sonidos, que también, sino en el orden o el modo con el que solía afrontar las canciones antes. Asimismo contó que Royal fue diagnosticado como esquizofrénico, pero que lo suyo era mas love sick, explicando cómo amaba a su esposa pero que tuvo que echarla de su vida ya que era un hombre tremendamente leal y, por algún motivo, le dio por pensar que esta le había sido infiel hasta tal punto que pensaba que sus 12 hijos no eran suyos. Alejar de ti a lo que amas, por traición. Se encerró en esa espiral de dolor y desesperación que lo llevó a aislarse por completo de todo y de todos, en su pena, amor, sufrimiento y arte. También habló de Dios, de ovnis, abducciones y demás asuntos que tanto obsesionaban a Royal Robertson. Un rato largo de charla contándonos cómo su enfermedad, soledad y desesperación inspiró muchas de sus imaginativas representaciones del espacio, visiones proféticas (volvió a mencionar el apocalipsis), la mitología religiosa y, como no, la destrucción. I found them to be incredibly beautiful, but incredibly tragic dijo, añadiendo que a pesar de toda la tortura, brutalidad y violencia de las pinturas, pudo apreciar en ellas cierta alegría y calor. So that’s what a lot of this material is about, if you are kind of confused.
Nuestro querido Sufjan nos hablaba abiertamente de cómo le habían roto el corazón recientemente, pudiendo ser el motivo principal de este gap entre discos, de tanta historia y rollo que ha tenido últimamente. Si un tio le rompe el corazón a Sufjan Stevens, este lo que hace es esconderse un tiempo para volver a reconstruirse, como hacemos todos. Solo que él en ese tiempo compone unas canciones sorprendentes. El resto nos limitamos a sobrevivir simplemente.
Impossible soul es el highlight del concierto con una clara energía y evolución a lo largo de los 25 minutos. La canción pasa a través de varios estilos e incluso temas, en cierto sentido las diferentes facetas del amor, el tira y afloja de una relación, incluyendo solos de guitarra, autotune y momentos espásticos hasta llegar al desenlace acústico en el que te encuentras ya sin aliento y totalmente desconcertado. No creo que existan muchos artistas capaces de acaparar el 200% de tu atención durante 25 minutos de un modo tan intenso. Si durante toda la noche sus movimientos de baile fueron en cierto modo pánfilos nunca desentonan y aquí menos, quizás porque Sufjan espolvorea su seriedad con una muy buena dosis de risas y autoironía.
Le voy a poner un par de pegas a la actuación. La ajena a él es que pusieron sillas en el teatro, de modo que el concierto fue sentado, con las ganas de bailar que te entran por momentos. La otra es que no tocara una de mis canciones preferidas, Sister. Aunque se lo voy a perdonar porque sonó mi otra gran canción de él.
En cierto modo, la actuación de Sufjan Stevens tiene un punto de renacimiento artístico de alguien que se ha sumergido en sus propias luchas y ansiedades. La idea final es liberarse de ellas. A modo de conjuro autotuneado canta it’s not so impossible!
Los nuevos sonidos electrónicos, no exentos de cierto punto cacofónico por momentos, las luces, colores y frenéticas proyecciones nos llevaron a un escenario algo apocalíptico si quieres, pero en el que la destrucción se celebra como un medio para la creación.
Canciones como las de Sufjan Stevens keep me out of therapy.
sábado, octubre 09, 2010
someone please cut the lights
A ver cómo explico lo siguiente sin que se me malinterprete o peque de algo que no quisiera. Perdona de antemano el rollo, pero mi sabida incapacidad para expresarme mejor hace que no me quede otro remedio o que no haya encontrado otro modo mejor hoy.
Te comento primero que, en farmacología, se conoce como desensibilización de receptores al proceso caracterizado por la pérdida de respuesta celular ante la acción de un ligando endógeno o exógeno. Es una respuesta homeostática de protección celular a una estimulación excesiva, ya sea crónica o aguda.
Unas consecuencias importantes de este proceso adaptativo es que daría lugar a una afinidad alterada para el ligando y el hecho de que cada vez se necesiten dosis más altas del ligando para tener el mismo efecto deseado.
El comentar que los perfiles de actuación cambian por desensibilización y en respuesta a cambios adaptativos del receptor/post-receptor, me ayudará a hacerme entender mejor lo que me ocurrió en el concierto de Arcade Fire, anoche, en su segundo show en el Shrine Auditorium de LA.
Fui el concierto bien, con ánimos y ganas, pero terminé desensibilizada por completo, y así te cuento hoy sobre ello, del modo más honesto posible. Ellos evocan a la épica y eso está bien, es divertido apelar a lo grandioso aunque termine en grandilocuencia. No consiguieron emocionarme o alterarme con todo ello. Lo pasé bien, disfruté pero no conecté tanto como hubiera deseado y, si así lo hice (aunque no a los niveles que una espera en un concierto de AF) fue aludiendo, como digo, a la épica y derroche de energía que destilan en cada canción. Por paradójico que suene, el concierto de AF no me resultó uno de esos conciertos que blow your mind y no te los puedes quitar de la cabeza aun habiendo pasado varias horas. No es de esos que provoquen ese rush interminable en el cuerpo. Es épico, sí, pero también lo buscan con ahínco, no porque surja de un modo natural.
Para la anécdota personal lo molón de encontrar este video, en el que se nos ve de refilón cuando Butler baja del escenario para su forzado y nada natural paseo entre la gente de arriba. Búscame por un segundo poco antes del 1.40. (Es lo que tiene haber comprado las entradas en presale, cuarta fila!).
Pensaba ahora, que quizás es que como la noche del jueves sufrieron contratiempos y errores varios, más de los deseados, pues la noche del viernes tan solo intentaban estar centrados para que la cosa saliera bien. Si por lo visto en la noche anterior la fuerza de su actuación consiguió maquillar sus defectos, en la segunda noche la búsqueda excesiva de cierta perfección y cuidado en el sonido les frenó algo en cuanto a la pasión que, al menos a mi, consiguieron transmitir. Yo lo sentí así. Quizás tan solo estaba desensibilizada.
Me pareció algo paradójico llevarme esa imagen de AF cuando ellos se encargan de sermonearnos sobre nuestra humanidad en un mundo cruel que la quiere dar por obsoleta. Mientras que ayer, por momentos los aprecié más automatizados que humanizados ejecutando su obra.
Reconozco que la sofistificación de esas composiciones reclama mucha atención pero el exceso de atención de la banda, que por mucho que se empeñen en saltar y moverse y bailar, están más pendientes de que todo salga perfecto que en dejarse llevar por ellas, provocó en mi cierta duda.
No te dan respiro entre canciones, eso seguro, de una te pasan a otra como queriendo mantenerte ahí arriba, donde se supone que te había dejado la canción anterior. Pero para mi gusto se les ve demasiado el plumero. Es todo como muy obvio. Creo que este grupo si peca de algo es de querer trascender siempre, y a veces en exceso. Y ese exceso de intencionalidad es lo que a mi me frena ante ellos. Quizás me esperaba algo realmente excitante, complejo, cautivador, y lo que lograron en mi fue desensibilizarme por completo.
Para la anécdota, Butler mencionó que tenía que felicitar al Barcelona por haber vencido a los NBA world champion
En general lo pasé bien, me encantó ver a una gran banda con grandes canciones en directo. Un buen plan para un viernes, pero repito que después de eso, pues vale pues muy bien y a otra cosa. No se convirtió en el evento que fagocitara el resto de la noche, no llegó a capturar por completo la atención, tan solo un (muy) buen primer capítulo. Hay otros conciertos en los que aun después son protagonistas de la noche, no fue el caso. Una pena. Como te decía al principio, no es que no me gustara, o que la banda no lo hiciera bien, simplemente lo que consiguieron fue desensibilizarme y, por tanto, el efecto no fue el esperado.
Tienen grandísimas canciones. Esta gente firma unas cuantas de las canciones más destacables de los últimos años. Pero, aun siendo bueno, no es el mejor ni el más impresionante ni más épico ni más memorable de los conciertos que yo he visto en mi vida. A veces estas cosas simplemente pasan.
Llenar el Shrine Auditorium hasta arriba de creyentes fieles a tu causa dos días seguidos debe ser una imagen impresionante. Ante ti toda esa gente coreando tus canciones. Al terminar el concierto pensaba qué grande se debe uno sentir al provocar esa reacción en tantísima gente, y en saberse hacerles feliz con tu música.