lunes, enero 30, 2006

Tras otros días insulsos de trabajo, el fin de semana vino lluvioso y gris, perfecto para abstraerme un poco más si cabe en la nada de mi misma. Me he dedicado a hacer esas cosas tranquilas que siempre apetecen para las que nunca hay tiempo, ya que es habitual verme en una espiral acelerada de cosas por hacer. Así que un fin de semana como este de vez en cuando no viene nada mal, sobre todo si estás tan cansada como yo en estos momentos. De modo que pasar la tarde de compras tras ir antes a la peluquería a cortarme el pelo, llevar al cine a mis sobrinos y escuchar música me parece un gran plan para un fin de semana en el que la prioridad más absoluta ha sido dormir.

Lo de escuchar música, y ponerme un poco al día de lo que me han recomendado me resulta de lo más reconfortante, salvo para recomendaciones como la que me hicieron el otro día. ¿Por qué me fío tan ciegamente a veces? No todo es bueno, y no todo lo que le gusta a los demás tiene porque gustarme a mi y viceversa…. En fin, algo de tiempo perdido y a otra cosa. Pero esta vez lo pienso decir, no lo dejaré pasar por alto, esto no se le hace a nadie!!! Bueno, supongo que la intención era buena, aunque hay que saber tener un poco de criterio, y sobre todo, hay que saber a quien se hacen recomendaciones, por muy bueno que me parezca no recomiendo todo a todo el mundo, hay cosas que se que a ciertas personas no le van a gustar seguro, cada persona tiene lo suyo y hay que saber verlo. De todas formas, sigo pensando que la intención fue buena, no así el disco en cuestión, ni la vista del que recomendó.

Por otra parte, mis dos sobrinos me llevaron al cine este sábado, y digo me llevaron porque aunque fuera yo quien llevara el coche, nunca hubiera ido a ver esa película por mi propia voluntad. Al final, en su defensa diré que no resultó tan mala como pude haber pensado a priori. Mis sobrinos son mayores para ser sobrinos. Me explico, con ella me llevo 11 años, exactamente la misma diferencia que hay entre su padre y yo, y con el niño unos 15. Ella, que va por los 16, resulta ser como mi hermana pequeña, y él resulta ser mi gran debilidad, y lo seguirá siendo si el tiempo y la adolescencia no lo estropean demasiado. El haber crecido con ellos hace que no tengamos una relación propia de tía-sobrinos, he jugado con ellos cuando aun a mi también me apetecía jugar, y ahora que a ellos ya les empieza a apetecer otras cosas ahí estoy yo para lo que quieran. De todas formas ya tengo ganas de más sobrinos, más que nada porque mi hermana y su marido ya están pensando en ello, y claro, en vista de la gran experiencia que he tenido con los de mi hermano mayor, me apetece y muy mucho lo de tener un sobrino pequeño. Recomiendo lo de los sobrinos, es una gran experiencia. Eres el mayor, pero no tienes porque ejercer como tal, no tienes porque necesariamente dar ejemplo, ni educar, que para eso están sus padres. Tú solo los disfrutas, y cuando se ponen pesados le pasas el testigo a sus padres, que para algo los trajeron al mundo. Puede resultar algo egoísta por mi parte, pero aun no ha salido mi instinto maternal a relucir. Además, ya me tocará ejercer de adulta con los míos propios, si los tengo algún día, así que mientras tanto me limitaré a seguir disfrutando de ellos y con ellos, y cuando me llegue el turno, si es que me llega, ya me saldrán el altruismo y el sacrifico, por ahora no. Mientras, me limitaré a seguir siendo “el gran ejemplo de lo que no deben hacer”, tal y como desde hace ya bastante tiempo han aprendido mis sobrinos que soy.

Para cerrar el fin de semana el domingo me fui a ver Brokeback Mountain. Me gusta ver el cine en versión original y, en este caso, además es un acierto. La película está bien, independientemente de lo mediática que pueda resultar la relación entre dos hombres, creo que refleja bastante bien la imposibilidad de estar con una persona, la impotencia que sufren por ello y lo infelices que les hace. Tiene fallos, como todas, y flojea en algunos momentos, como todas también. ¿los vaqueros cuidan ovejas? ¿quien cuida de las vacas entonces? El ritmo de la película se relantece hasta hacerte entender que realmente pasan 20 años entre el principio y el final, y si esa era la intención, lo han conseguido. Aunque parezca fácil a priori ponerle solución al querer estar con una persona y no poder, no siempre es sencillo dejar de ser tu mismo, con la educación que has recibido y sobre todo huir de tu entorno. A eso le sumamos el hecho de que uno de los protagonistas tiene un grave problema de comunicación, incluso consigo mismo. Cada vez está más cerrado en si mismo, y no digo que eso le guste o lo elija, ya que ni puede ni sabe ser de otro modo. Y aunque parezca extraño, es eso lo que más me ha impactado, al margen del resto de la historia, que está bien. La incapacidad de comunicarse del modo adecuado por momentos le va invadiendo. Cada vez más encerrado en si mismo, sin saber como escapar a eso. No siempre es fácil ser sociable, hablar con los que te rodean y te quieren de lo que ocurre en tu interior, de lo que te ocurre, de lo que sientes. Es como pegarse cabezazos contra la pared. A veces yo misma siento como se ha creado un vacío entre mi propio yo y el exterior, ni siquiera lo que digo es lo que quiero decir. Y la poca o nula posibilidad de ser de otro modo me ofusca, me enfada y me encierra más en mi misma. Es un círculo vicioso del que es realmente complicado escapar. Es un círculo vicioso, repito, que te obliga a respirar hondo cada vez que sales de casa para enfrentarte con el mundo, y sobre todo a crear una especie de personaje en continua lucha para que éste sea lo mas parecido a tu propio yo.

Hay dos cosas que realmente odio, pasar frío y pasar sueño. Estas semanas ambas cosas han sido habituales, por lo que necesitaba purgarme un poco de ello.

jueves, enero 26, 2006

Llevo unos días encerrada en mi misma, no he hecho gran cosa pero no he dejado de hacer cosas importantes. En estos días me he puesto las pilas con la memoria de mi tesis, y con tanto escribir lo único a destacar ha sido Sufjan Stevens y Primal Scream. Y digo lo único por que no creo que a nadie le interese mucho lo escrito en la memoria sobre neurofisiología, pero en cambio, si que creo que en un momento dado a alguien le pueda interesar algo de música. El primero es un gran “recien”descubrimiento que no dejo de escuchar de un modo casi enfermizo. ¿Sabes cuando no puedes dejar de escuchar una canción, y aun no te parece suficiente? Pues sería algo así, pero con todo el disco…. Lo que ocurre es que para cambiar un poco el chip lo intercalo con Primal Scream, un variado muy bueno de todos sus discos…. Si no me equivoco, creo que el de Primal Scream debió ser, sino el primero, sí uno de los primeros discos que me compré ya con algo de criterio propio, allá por 1994…. Se ve que el tiempo no me ha quitado la razón cuando los continúo escuchando. Son duros, a veces hasta pegadizos, pero nunca fáciles. Lo se, y me gustan. Cosas como: “Have you ever had a broken heart, Have you ever lost your mind, Have you ever woke up screamin’, ’cause you’re so lonely you could die, Why did you go, why did you go” o “I wasn’t born to follow”, “What I’ve got in my head you can’t buy, steal or borrow” o “Punk is not sexual, it’s just aggression “ justifican muchas cosas…. En ellos el ritmo se impone a la melodía, con grandes discos como Screamadelica (1991), innovan y rompen o pretenden romper estructuras. Pecan de pretenciosos (especialmente Bobby Guillespie) por pretender salvar al rock n roll al intentar modernizarlo. Todo eso es cierto, pero pueden porque tienen buenas canciones. Sufjan Stevens es todo lo contrario. Música más reconfortante, de melodías perfectamente orquestadas. Con cosas como: “If I was crying in the van with my friend, it was for freedom, from myself, and from the land”. Escuchar el disco es como irse de viaje sin moverse del sitio, por lo que me ha venido muy bien tenerlo cerca estos días. Una buena combinación para un periodo de encierro tan voluntario como necesario.

jueves, enero 12, 2006

Me sorprendo, me enfado, grito y me repito que no volverá a pasar. Me juro y me perjuro que esto pasará, que no quedará así, que no se repetirá, que no me repetiré. Y me miento y me lo creo....

martes, enero 10, 2006

Continúo con esta cosa de para que sirve esto de los bloggs… todo el mundo tiene el suyo, de hecho últimamente parece que no eres nadie sino tienes uno colgado en la red!! Supongo que con esto me lo tengo que tomar como si de un cuaderno de bitácora se tratara, y así lo haré. ¿Con qué continuar una vez expuesta la clara y por otra parte inútil intención de estas palabras?

Hay momentos en los que por mi cabeza pasan un montón de cosas sin sentido. Mi verborrea es interminente en el tiempo pero caudalosa, extensa y espesa en el momento, así que parece que este podría ser el lugar más adecuado, más aun si nadie conocido sabe de su existencia y por lo tanto puedo soltar y soltar sin problemas de incorrecciones con nada.

En este recién estrenado 2006 todo el mundo se propone un montón de cosas a sabiendas de que luego no las cumplirá seguro, de hecho si no te haces los propósitos es como si no pasaras bien al nuevo año. Es como eso de salir de la cama siempre por el mismo lado, si no lo haces así ese día ya no saldrá nada bien. Sabes que es una tontería pero lo sigues haciendo porque en el lugar mas recóndito de tu mente hay algo que te dice que así no irán bien las cosas. El caso es que yo he empezado este año, o mejor dicho terminé el anterior con una lista mental de todo aquello que me hubiera gustado hacer y que por una u otra razón no hice. Por una parte hay que reconocerle el mérito al 2005 al comprobar que no son tantas las cosas que se quedaron por hacer, por otro lado, hay alguna que aun me escuece no haber logrado. Y ya en el año nuevo solo me propuse una cosa y es que se ve que empiezo ahorrativa. El Plan 2006 se limita a una sola cosa, muy simple, dejarme de tontos y de tonterías. Parece sencillo pero no lo es tanto. Parece fácil pero tampoco lo resulta. A todos nos pasa continuamente eso de encontrarnos con mucho tonto alrededor, tontos por los que inevitablemente nos sentimos atraídos. Al menos a mi me pasa, debe ser por esa extraña capacidad que tengo de interesarles, lo cual tampoco dice mucho a mi favor, de modo que siempre tengo alrededor revoloteando alguno. El último del año pasado fue ya el colmo de la tontería, y si a eso le añadimos la inmadurez y el no saber llevar las cosas me encontré en una situación totalmente surrealista, porque lo más destacable del asunto fue el que no supiera llevar la situación así como se requería. Pero con todo ello ya se lo que no tengo que hacer la próxima vez.

Si me dejo de tontos, en principio también me dejaré de tonterías, no es así? Parece sencillo, habrá que verlo…. Por lo pronto ya estoy fallando un poco al plan 2006, al aparecer de repente y sin aviso previo (como suele suceder) otro con méritos suficientes para incrementar la lista de tontos que hacen tonterías que voy llenando en mis ratos libres, ya que aunque a priori no parece un tonto, estoy segura de que me sorprenderá con tonterías en breve. No lo conozco, pero está ahí, revoloteando a mi alrededor. Con este o van bien las cosas o no van, directamente. Por ahora no puede ser mas encantador conmigo, pero ya he comentado que no lo conozco. Todo se andará. Pero eso lo dejo para otro momento, por ahora seguiré contando hormigueros….